Los anuncios de medicamentos contra la depresión están constantemente smattered a través del tubo de hoy. Se acompañan con las posibles ventajas de tomar un medicamento u otro para aliviar este mal común. Por ley este tipo de anuncios se siguen con una lista de contraindicaciones (posibles efectos secundarios) algunos que suenan mucho peor que la propia depresión.
Junto con estos anuncios es un poco disclaimer notado o vamos a referirse a ella como una declaración honesta sencilla sobre la depresión. Esa declaración es que la causa de la depresión común no se conoce totalmente. Yo uso la palabra común aquí por un propósito importante. Sin duda alguna la depresión es en realidad causada por un desequilibrio químico o una descarga emocional de algún tipo. Nadie podría discutir ese punto.
Se dice que hasta veinte millones de estadounidenses tienen algún tipo de depresión. Parece que es un fenómeno moderno de nuestra historia como nación. Hay pocos registros de esta enfermedad antes de principios del siglo XX. La depresión antes de la era moderna se refiere a menudo como la melancolía. Abraham Lincoln fue dicho a sufrir ataques profundos de melancolía que se compensaron con momentos de jovialidad y levedad. Tal vez un cambio en su actitud fue su propia manera de hacer ajustes o una automedicación comportamiento de las clases.
Son pocos los estudios realizados sobre la depresión incluyen una comparación lado a lado con otros países o culturas. Algunos países no tienen prácticamente ningún número considerable de casos de depresión. A menudo, estos son los países más pobres del mundo. Mucho se podría deducir de esto sobre la cantidad de dinero; la riqueza y el materialismo tienen que ver con la fabricación de los estadounidenses felices y bien equilibrado.
En treinta y cinco años de estudio de la Biblia nunca he oído un predicador o teólogo que se precie nunca acercarse a las causas de la depresión sobre la base de un punto de vista bíblico. No sólo explicar la Biblia la causa de la depresión, sino que proporciona una respuesta completa a él también. No, no es un milagro o una sanidad divina es simplemente un cambio profundo en una vida que empuja la depresión a veces de forma instantánea y en algunos casos más lentamente. Primero echemos un vistazo a la causa de la mayoría depresión general en las personas de acuerdo a la Biblia.
Contrariamente a la opinión general Dios no solo guiño a la incredulidad pero participa activamente en condenar al creyente a responder a su llamada a la salvación. Su obstinada búsqueda es despedido no sólo por el hecho de que son pecadores, sino porque ama a cada ser humano que nace de una manera que está más allá de nuestra imaginación. Dios está tratando de amar a la gente en su reino no arrastran en ella. Para ello tiene que hacerlos plenamente conscientes de su separación de él. Es un regalo de la presión aplicada por el Espíritu Santo de Dios.
Los creyentes a menudo dicen que vinieron bajo la convicción del Espíritu Santo y que es lo que finalmente los llevó a orar y aceptar la salvación que Dios ofrece. Los incrédulos dicen que están deprimidas, de mal humor o en algún estado inexplicable de la mente. Que la convicción descrito por el creyente y la depresión que siente el creyente es una y la misma cosa es verificada por los incontables millones durante los siglos que dejaron de experimentar la depresión poco después de que cedieron a Dios. He visto este resultado innumerables veces en los últimos más de tres décadas. Esta experiencia de primera mano y el apoyo en las Escrituras me han convencido más allá de duda que millones de personas están sufriendo innecesariamente.
Yo nunca le recomendaría a nadie para no ver a su médico para un examen completo de su depresión. Si sucede ser un desequilibrio químico o relacionado con una experiencia emocional luego se contestará la pregunta. Si esto no responde a la pregunta entonces buscar a Dios por su salvación debe ser el próximo paso en sus vidas. En realidad debería ser el primer paso en sus vidas.
Hablando por mí creo que vive separado de amor de Jesús y no tener cierta esperanza del futuro sería realmente muy deprimente. Me alegro de haber respondido a esa pregunta hace muchos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario